Acerca de la existencia de otros mundos

Estrabón, Geografía I 2.24: Crates afirma que hay otros mundos habitados simétricos al nuestro.
          "Crates afirma que la zona Tórrida está ocupada por el Océano y a ambos lados de ella hay una zona Templada, la de nuestro lado y la correspondiente simétrica del otro lado. Así pues, al igual que entre nosotros son llamados etíopes aquellos que asentados más bien al Mediodía, a lo largo del orbe habitado (...), así también se cree que es preciso imaginar más allá del Océano también etíopes que serán los más alejados de entre los de la zona Templada, que habitan precisamente junto al mismo Océano".
(Trad. Molina Marín, Geographica, 2010)

Macrobio, Comentario al Sueño de Escipión, V 23: además de la tierra habitada existen otros mundos (continentes) situados  simétricamente a los nuestros.
            “Existen cuatro mundos habitados situados simétricamente cada uno en un cuarto del globo terrestre y separados en el eje Este-Oeste por el curso del principal Océano que discurre a lo largo del Ecuador y en el eje Norte-Sur por los brazos o golfos del Océano”
(Trad. Fernando Navarro, Gredos, 2006)

Macrobio, Comentario al Sueño de Escipión, V 24-27: puede haber vida en los otros mundos (continentes).
            “Si la vida es posible para nosotros en esta parte de la Tierra y miramos el cielo sobre nuestras cabezas porque el Sol nace y muere para nosotros y porque disfrutamos del aire (...) ¿por qué no habríamos de creer que también hay vida allí (en el hemisferio Sur), donde se dan idénticas condiciones que aquí? (...) Debemos suponer que los hombres que se supone viven allí respiran el  mismo aire que nosotros; el mismo clima templado hay en la totalidad del circuito de ambos hemisferios; verán el mismo sol; pisarán el suelo igual que nosotros (...). Si sabemos que Oriente y Occidente están habitados ¿qué nos impide creer que la región opuesta a la nuestra también lo esté?”.
(Trad. Francisco Navarro, Gredos, 2006)


Macrobio, escritor y gramático romano
del último cuarto del s. IV d. C.

San Agustín, La Ciudad de Dios XVI 9: no puede haber vida en otros mundos (continentes) aun en el caso de que existieran.
            “¿Es creíble que en la parte inferior de la Tierra, opuesta a la que nosotros habitamos, haya antípodas? No podemos creer en absoluto a los que cuentan que también hay antípodas, esto es, que hay nombres en la otra parte de la Tierra (...) que pisan lo opuesto de nuestros pies, porque no lo afirman por haberlo aprendido a partir de alguna historia sino que solo lo sospechan (...). Aunque se crea y se afirme, por medio de alguna demostración, que el mundo es de forma circular y esférica, con todo, no se sigue de eso que también por aquella parte deba emerger la tierra sobre las aguas de los mares; y, aunque estuviera desnuda y descubierta, tampoco es necesario que esté poblada de hombres, pues de ningún modo hace mención de eso la Escritura (...). Parece demasiado absurdo decir que los hombres pudieron navegar y llegar de esta parte a aquella, atravesando el inmenso piélago del Océano, de forma que, también allí, los descendientes del primer hombre viniesen a multiplicar el linaje humano”.
(trad. propia)

Plinio el Viejo, Historia Natural II 172: en los polos no puede haber vida.
            “Todo lo que está situado en los dos polos extremos en torno a ambos polos está cubierto por hielo eterno y un frío terrible; en ambos lados hay tinieblas perpetuas y una luz débil”.
(Trad. Ana Mª Moure Casas, Gredos, 1990)

Pierre D´Ailly, Imago Mundi, p. 41: en el Hemisferio sur habitan los antípodas.
            “Sobre la cuarta zona (del planeta) que está entre el trópico hiemal y el círculo antártico, algunos dicen que es templada y habitable, como la nuestra. Y por eso dicen que allí están los antípodas”

(Trad. A. Ramírez de Verger)