Taprobane

          En la Tabula Peutingeriana esta isla marca el extremo oriental del mundo habitado. Lo mismo hace Plinio (Historia Natural VII 22) que, al describir la India, considera a esta isla como el confín más alejado hasta el punto de identificarla con las antípodas, es decir, el continente simétrico a Asia cuya existencia postula Pomponio Mela, contemporáneo suyo (Antíctones,  llaman ambos a estas tierras). Debemos identificar, sin embargo, a esta isla, con la actual Sri Lanka (antigua Ceilán), según la hipótesis más aceptada.


Localización de Sri Lanka, en el extremo sudoeste de la India


          Plinio se jacta de haber obtenido una información más exacta que los antiguos a través de los embajadores de esta isla que llegaron a Roma en tiempos de Claudio por mediación de un liberto de Anio Plócamo – arrendador del impuesto sobre el comercio del Mar Rojo -. (Historia Natural VII 22). Conocemos el nombre de este liberto a través de una inscripción hallada entre las ciudades de Copto y Berenice (en la margen derecha del Nilo) que marcaban la ruta entre el Nilo y el mar Rojo: Lisas. Este liberto fue arrastrado por los vientos hasta Taprobane donde aprendió el idioma y convenció a su rey para que enviara a Roma a cuatro embajadores. (Mª Luisa Arribas, Historia Natural, Gredos, 1998, nota 304).

La isla de Taprobane según Ptolomeo (s. II d. de C.)

          En su descripción –perdida- de la isla de Taprobane, Artemidoro presentaba una sociedad ideal asentada en unas islas del Océano Meridional. Diodoro, en su obra Biblioteca Histórica (II 55-60) nos transmite un relato tomado de este autor con intención de probar la existencia de estas islas. En dicho relato un personaje llamado Yámbulo se encuentra en el Índico, en unas islas cuya existencia desconocía. Es raptado por unos piratas etíopes y sometido, junto a un compañero, a un ritual que se repite cada sesenta generaciones entre aquellos pueblos: se abandona a un extranjero en una embarcación a expensas de la corriente con la consigna de no volver atrás bajo pena de muerte. Yámbulo y su compañero tuvieron la suerte de llegar a Taprobane donde fueron rescatados.


Isla de Taprobane, en el extremo de la India,
según la Tabula Peutingeriana (s. IV)

            En función de este relato Artemidoro situó Taprobane en el extremo de una India reducida a la mínima expresión (por los errores de unos cálculos imaginarios). A través de este relato podemos conocer cómo era Taprobane que se describe como un lugar de utopía.

                  Los europeos no volvieron a  Ceilán hasta el s. XVI. En 1505, el portugués Lourenço de Almeida realizó un primer asentamiento en la isla que fue ampliado en 1517 con la fundación de una colonia. Después fue ocupada por los holandeses en el s. XVII, tras expulsar a los portugueses. En 1802 pasó a ser colonia inglesa. Pero antes de todos ellos, fueron los romanos, como Anio Plócamo, quienes entablaron relaciones comerciales con esta isla, hace dos mil años.